En 2023, Lizzo fue acusada y demandada por acoso sexual, humillación por peso y crear un ambiente laboral hostil por tres de sus exbailarinas: Arianna Davis, Noelle Rodríguez y Crystal Williams. Las demandantes aseguraban que la cantante las había presionado y avergonzado por su cuerpo. Además de exponerlas a situaciones incómodas dentro de su entorno de trabajo.
Ahora, casi al cierre de 2025, el caso ha dado un giro importante. Un juez de la Corte Superior desestimó las principales acusaciones y las demandantes decidieron retirar oficialmente su apelación. Con esta decisión, Lizzo sale victoriosa de esta batalla legal y habló por primera vez del tema de forma directa a través de un mensaje en redes sociales, donde afirmó que “finalmente la verdad está saliendo a la luz”.
En el comunicado, Lizzo explicó que las acusaciones relacionadas con humillación por peso fueron retiradas por las demandantes, quienes —según ella— reconocieron ante el tribunal que no contaban con pruebas suficientes para sostenerlas. “No había evidencia de que alguien fuera despedido por subir de peso, porque eso nunca ocurrió”, expresó, asegurando que el fallo confirma su versión de los hechos.
Lizzo se presenta en el O2 Arena el 15 de marzo de 2023 en Londres, Inglaterra. Jim Dyson / Getty Images.
Cabe recordar que en febrero de 2024, el juez ya había determinado que las acusaciones de discriminación corporal no tenían base legal.
El motivo del despido, según Lizzo
Lizzo ha querido dejar claro cuál fue el verdadero motivo del despido de las bailarinas: una grabación realizada sin su consentimiento. En su mensaje, la cantante explica que las exempleadas la grabaron en un contexto privado sin autorización y que posteriormente compartieron ese material con un exempleado, lo que habría provocado la ruptura definitiva de la relación laboral.
“Nunca he despedido a alguien por subir de peso”, enfatiza Lizzo en el comunicado. “Fueron despedidas por grabarme en privado sin mi consentimiento y enviar ese material a terceros. Siempre he apoyado y defendido a personas con cuerpos grandes, y he usado mi plataforma para amplificar sus voces”, añadió, reafirmando su postura frente a las acusaciones de estigmatización corporal.
Lizzo shares new video after fat-shaming allegations brought against her in court were dropped by former employees:
“They weren’t fired for gaining weight. They were fired for taking a private recording of me without my consent and sending it off to ex-employees.” pic.twitter.com/C5mzZktzpk
La artista describe todo el proceso como una situación “dolorosa y fabricada” que la ha acompañado durante más de dos años. Reconoce que atravesar este episodio en silencio fue emocionalmente devastador, pero asegura que confió plenamente en el trabajo de su equipo legal. “Dejé que mis abogados hicieran su trabajo y estoy profundamente agradecida por esta victoria”, señaló.
Aun así, Lizzo aclara que su camino legal no ha terminado. “Sigo en una batalla judicial. No voy a llegar a ningún acuerdo. Voy a enfrentar cada demanda hasta que la verdad quede completamente clara”, concluyó, dejando claro que no piensa cerrar el tema hasta limpiar por completo su nombre.
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